En diálogo con Alejandro Bustos en “Buenos días mi gente” por Radio 107.5 MHz Un Nuevo Sol, Splendid, Darío Sánchez, referente del sector y dirigente de la Federación de PYMES, analizó la crítica situación que atraviesan las pequeñas y medianas empresas en Argentina.
Sánchez señaló que “la actividad productiva está trabajando apenas al 50% de su capacidad instalada, cuando hace algunos años ya se hablaba de crisis estando en el 70 o 75%”. Según los relevamientos nacionales, se registra una pérdida del 40% del poder adquisitivo, caída del consumo y un aumento preocupante del cierre de comercios.
El dirigente explicó que en Villa Mercedes se hizo un relevamiento con 30 comercios de distintos rubros y el resultado arrojó una caída promedio del 60% en la facturación mensual, lo que pone en riesgo la subsistencia de las empresas. “Con ese nivel de caída no hay negocio que pueda sostenerse. Se destruyó la cadena de pagos, no es que está en riesgo: ya está rota”, afirmó.
Durante la charla también se remarcó la falta de políticas nacionales para el sector productivo: “Hoy no hay un área real de producción en el gobierno con la cual sentarse a trabajar. Eso agrava la situación porque no tenemos dónde canalizar los reclamos ni buscar soluciones”.
El impacto no solo se percibe en las fábricas, sino también en el comercio local: “Los centros comerciales parecen cementerios; la gente no entra a los negocios y muchos comerciantes se ven obligados a cerrar o trasladarse a lugares más baratos para intentar sobrevivir”.
Sánchez también advirtió que incluso rubros básicos como la alimentación muestran balances en rojo: “Cuando hasta los negocios de comida trabajan a pérdida, la alarma ya está al rojo vivo”.