Desde hace muchos años quienes se han ido apropiando de muchas tierras en zonas que están destinadas naturalmente a reservorios biológicos de agua con una gran biodiversidad que hace el sostenimiento real del ambiente y principalmente el cuidado de las reservas de agua limpia para consumo humano, han tenido como metodología eliminar el monte nativo y los pastizales que hacen de filtro para purificar; con el fin de extender las fronteras agropecuarias y ganaderas.
Una de esas formas, la que más a mano les queda es mediante la quema, generando incendios devastadores con pérdidas no solo económicas, que son inmedibles, sino fundamentalmente desertificación de millones de hectáreas para la sobre explotación de la tierra.
Desde hace meses que los incendios generados intencionalmente, además de los daños ambientales que detallamos, están produciendo graves problemas a la salud pública. Los reclamos y las exigencias de terminar con estas prácticas nunca han sido escuchados por los distintos gobernantes y el poder judicial que se maneja en tándem con el poder económico.
La urgente sanción de la Ley Humedales ya no admite más dilaciones. Como tampoco las sanciones ejemplificadoras para quienes insisten en esas prácticas que van en detrimento de las actuales y venideras generaciones con el solo pretexto de la acumulación y concentración de riquezas.
Desde altas horas de la madrugada, activistas socio ambientales están realizando una acción directa pacífica para exigir que en el plenario de comisiones se garantice el tratado de la Ley de Humedales Consensuada – Expediente 75-D-2022. La acción directa consiste en un encadenamiento de sus propios cuerpos a las puertas de Gobernación, bloqueando el ingreso.
Activistas afirman “Esta es una acción pacífica; nos manifestamos porque estas quemas no solo están terminando con la vida del planeta en medio de una catástrofe climática y ecológica, sino que están atentando directamente con la salud de la población”. Es así que afirman sostener la intervención hasta que desde el plenario de comisiones se confirme el tratado, no de cualquier ley, sino de la consensuada, expediente 75-D-2022.
“Estamos acá también en apoyo a las organizaciones que en este momento están en el congreso, donde se está tratando en plenario de comisiones cuál será el proyecto de Ley a tratar. Somos la ciudadanía organizada, y necesitamos unirnos para hacer respetar nuestros derechos. Esto es un llamado a la acción; estamos desobedeciendo la ley, pero ese no es el hecho violento. Violencia es que estemos respirando humo. Y nos preocupa que este sistema democrático no nos esté representando. Los gobiernos deben decir la verdad sobre la crisis climática y ecológica, actuar en consecuencia y abrir la democracia, generando mecanismos de participación directa y vinculantes” concluyen los militantes.
Fuente: Bambacoop