El Tribunal resolvió por mayoría absolver a los tres imputados bajo el principio del beneficio de la duda. Se ordenó la libertad inmediata de Alejandra Espinosa, la única que permanecía detenida. El fallo generó malestar en la familia de Abel Ortiz, que esperaba una resolución tras once años de investigación.
El Tribunal integrado por Sandra Ehlrich, María Eugenia Zavala Chacur y José Luis Flores dio a conocer el veredicto a las 19:44. Por mayoría, con la disidencia de la jueza Ehlrich, se dispuso absolver a Marcelo Acevedo, Alejandra Espinosa y María Vázquez del delito de asociación ilícita. La decisión se fundó en el beneficio de la duda. La magistrada Ehlrich, en su voto, consideró acreditada la existencia del delito y la responsabilidad penal de los acusados, pero su postura no prevaleció.
Los tres imputados habían llegado a juicio señalados como integrantes de una organización que habría intervenido en distintos delitos, entre ellos acciones presuntamente vinculadas a la desaparición forzada de Abel Ortiz. La Fiscalía había solicitado 10 años de prisión para Acevedo y Espinosa, y 5 para Vázquez, mientras que las defensas reclamaron la absolución.
La lectura del fallo provocó indignación en los familiares de Ortiz, quienes aguardaban respuestas desde hace once años. Espinosa recuperó de inmediato la libertad, y Acevedo y Vázquez también quedaron desvinculados de toda acusación.
Durante la audiencia de alegatos, que se extendió por seis horas, la Fiscalía sostuvo que estaban acreditados los hechos que respaldaban la acusación, e hizo referencia a supuestas irregularidades, omisiones funcionales, filtración de información y maniobras que habrían obstaculizado la investigación por la desaparición de Ortiz. También señaló vínculos personales entre los imputados y la existencia de conductas compatibles con una asociación ilícita.
La querella, representada por Bautista Rivadera, coincidió en que se había demostrado que los acusados integraban una organización ilícita y que tuvieron injerencia en la desaparición de Ortiz. Afirmó que el último contacto del joven fue con Espinosa y mencionó testimonios que apuntaban a un hecho forzado.
Las defensas, en cambio, insistieron en la ausencia de pruebas concretas, la falta de elementos que permitieran sostener la existencia de una asociación ilícita y la inexistencia de evidencias que ubicaran a los acusados en acciones ilícitas o coordinadas. Se subrayó que muchos de los argumentos fiscales se apoyaban en suposiciones y no en evidencia verificable.
En sus últimas palabras, Acevedo expresó que era inocente y sostuvo que la causa había dañado su vida y su carrera. El Tribunal, finalmente, resolvió absolver a los tres imputados por falta de certeza y conforme al beneficio de la duda, dejando abierta la herida de una familia que continúa sin respuestas sobre el destino de Abel Ortiz.
Esta resolución, aunque definitiva en esta instancia, mantiene vigente un interrogante central: el paradero de Ortiz, cuya desaparición sigue sin esclarecerse.
INFO Y FOTO: El chorrillero

