El fundador de Telegram, Pavel Durov, reveló cómo repartirá su fortuna de USD 13.900 millones entre sus 100 hijos

El excéntrico creador de la plataforma de mensajería donó esperma de forma sistemática por más de 15 años, por eso tiene una descendencia tan grande. Además, tiene otros seis hijos nacidos de tres parejas distintas
Pavel Durov, fundador de Telegram y uno de los empresarios tecnológicos más influyentes, ha dispuesto que su fortuna, valorada en 13.900 millones de dólares, sea heredada por más de 100 hijos, concebidos tanto de manera natural como mediante donaciones de esperma realizadas en los últimos 15 años. La información fue dada a conocer por la revista francesa Le Point, a la que el empresario concedió una entrevista exclusiva.

“No hago diferencia entre mis hijos: están los que fueron concebidos naturalmente y los que provienen de mis donaciones de esperma”, declaró Durov, de 39 años. “Todos son mis hijos y tendrán los mismos derechos”, añadió el fundador y director ejecutivo de Telegram, quien actualmente ocupa el puesto 40 en el Bloomberg Billionaires Index.

Según Le Point, el testamento incluye una cláusula que impide a los herederos acceder a los fondos antes de transcurridos treinta años desde la fecha actual. Esta medida busca asegurar que los descendientes tengan la madurez suficiente para administrar la herencia.

“Escribí mi testamento muy recientemente”, afirmó Durov a Le Point. “Decidí que mis hijos no tendrían acceso a mi fortuna hasta que transcurra un período de treinta años, a partir de hoy”.

De acuerdo con la revista francesa, el empresario planea distribuir su fortuna de forma equitativa entre todos sus descendientes, sin importar el método de concepción. Además, manifestó su intención de hacer público su ADN para facilitar que sus hijos puedan identificarse entre sí. “Es un riesgo, pero no me arrepiento”, sostuvo, y destacó que la donación de esperma debería dejar de estar estigmatizada.

Según reveló el año pasado en su canal oficial de Telegram, la historia de Durov como donante comenzó hace quince años, cuando un amigo le pidió ayuda para concebir, debido a problemas de fertilidad con su esposa. Inicialmente lo tomó como una broma, pero tras consultar con el director de una clínica especializada, comprendió la escasez global de esperma sano.

Desde entonces, más de 100 parejas en diversos países han logrado concebir hijos con su esperma, indicó el empresario. Incluso años después de haber dejado de ser donante activo, su material genético sigue disponible en clínicas de fertilidad. “Estoy orgulloso de haber hecho mi parte para aliviar la escasez mundial de esperma sano”, escribió Durov a sus más de 11 millones de seguidores en Telegram.

Su filosofía pronatalista, similar a la que promueven figuras como Elon Musk, sostiene que la humanidad debe fomentar activamente la natalidad ante el descenso de las tasas de reproducción. Esta perspectiva forma parte de su visión de futuro y refuerza su carácter controvertido, diferenciándolo del típico perfil de ejecutivo tecnológico.