Este viernes, Nelson Romero, el empresario merlino intensamente buscado, fue hallado sin vida en las afueras de Río Gallegos, Santa Cruz.
El hombre de 56 años fue encontrado semi enterrado en la estepa patagónica, cubierto con una ligera capa de tierra por agentes de la Comisaría 1°, quienes estaban a punto de rendirse tras tres días de intensos rastrillajes en los alrededores de la ciudad.
Romero, dedicado a la seguridad privada, había sido visto por última vez el lunes a las 20:00. Salió de su domicilio en una camioneta Ford Ranger blanca con logotipos de su empresa, acompañado de su perro, un bulldog francés blanco y negro.
Los efectivos detectaron un montículo de tierra que había sido removido recientemente. “Es la persona que estamos buscando. Avisá a la superioridad”, informaron los brigadistas, según La Opinión Austral. El cuerpo estaba enterrado a solo 50 o 60 centímetros de profundidad; solo se veían su rostro y un tatuaje en el pecho que confirmaba su identidad.
La información preliminar indica que, debido a la capa de tierra, no se pudo determinar si el cuerpo presentaba lesiones visibles en el rostro.
Entre los presentes se encontraban el juez Fernando Zanetta, encargado de la causa, y el jefe de Policía, comisario general Martín Agüero. La presencia policial se intensificó con el tiempo, y los familiares del empresario llegaron para reconocer el cuerpo. El perímetro fue delimitado por la naturaleza del terreno, el camino de tierra y la presencia de los agentes. La “base de operaciones” y el bloqueo para civiles y periodistas se establecieron a unos 750 metros del hallazgo.
Cerca de las 20:00, llegaron móviles de Criminalística. Los agentes instalaron generadores eléctricos y reflectores para realizar las pericias, con la ayuda de la luz artificial. También se utilizaron palas para excavar, y el trabajo continuó bajo la luz de la luna y artificial.
Los profesionales emplearon una técnica de “afuera hacia adentro”, es decir, examinar el entorno del hallazgo antes de proceder a desenterrar el cuerpo.
El próximo paso en la investigación será la autopsia, programada para el sábado en la Morgue Judicial de la calle Kennedy.
José Daniel Cabrera Gallardo, un suboficial del Ejército de 27 años, está detenido por el caso. Durante la noche, el abogado defensor, Jorge Trevotich, declaró en una entrevista con “Café y Noticias” de Al Sur Noticias que su cliente le confesó el crimen.