El exministro de Seguridad de San Luis, Claudio Latini, rompió el silencio tras ser condenado a dos años y medio de prisión en suspenso por peculado, y calificó la sentencia como una “persecución política” impulsada por el Gobierno de Claudio Poggi y la actual titular del área, Nancy Sosa, a quien acusó de haber “armado una causa con fines de destrucción personal y familiar”.
En declaraciones radiales, el excomisario sostuvo que la denuncia en su contra fue construida a partir de falsos testimonios. “Ella le tiró la lengua a algunos funcionarios para armar una historia que no es real”, afirmó, y reiteró que es inocente. “Nunca me robé nada. Lo que retiré del edificio eran cosas mías: tres estanterías, un dispenser, libros, cuadros y objetos personales”, explicó.
Latini negó haberse llevado televisores, una notebook, monopatines o sillones del Ministerio, los cuales —según indicó— “fueron denunciados como perdidos o robados por personal de Seguridad Comunitaria”. “Jamás sustraje bienes del Estado, pero sabíamos que venían contra nosotros con este grado de malicia”, agregó.
También atribuyó la situación a un conflicto personal con Sosa que, según dijo, se remonta a años atrás, cuando ambos trabajaban en la fuerza policial. “Ella tiene una bronca personal que arrastra desde hace tiempo y la transformó en una campaña pública”, sostuvo.
El exministro aprovechó para cuestionar la situación actual de la seguridad provincial. “Hoy el Ministerio se dedica a perseguir a policías y funcionarios, en lugar de cuidar a la gente. En Juana Koslay roban todos los días. Nunca vi tanta inseguridad como ahora”, afirmó.
Latini aseguró además que la persecución se extendió a su familia luego de su salida del cargo. “A mi esposa la echaron de la Policía, a mis dos hijos los sacaron de sus trabajos en Laboratorios Puntanos y en la Secretaría de Vivienda, y hasta una prima perdió su puesto solo por llevar mi apellido”, denunció.
Sobre el momento en que rompió en llanto al escuchar la sentencia, explicó: “No fue debilidad, fue bronca e impotencia. Me dolió la injusticia y las burlas que hicieron desde el Gobierno”. Confirmó que apelará la condena y que seguirá defendiendo su nombre “en todos los ámbitos posibles”.
Latini recordó que, tras el cambio de gobierno, Poggi había declarado públicamente que expulsaría a los funcionarios de la gestión anterior. “Si el gobernador decía que nos iban a correr a patadas, ¿para qué iba a volver a Terrazas?”, cuestionó.
Con un tono desafiante, concluyó: “Me quieren destrozar políticamente, pero no van a poder. Tengo la conciencia tranquila y la gente sabe quién soy”.