El reconocido experto propone, en diálogo con Biohack Yourself Magazine, abandonar el término “mental” y adoptar un enfoque integral basado en tres pilares fundamentales respaldados por décadas de investigación clínica
Según datos del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la cantidad de personas que viven con enfermedad de Alzheimer se duplica cada cinco años después de los 65, y se proyecta que alcanzará los 14 millones para 2060. Además, aproximadamente el 26% de los adultos estadounidenses —es decir, casi uno de cada cuatro— experimenta anualmente algún trastorno mental diagnosticable.
Ante esta realidad, el reconocido psiquiatra Daniel Amen propone un cambio de paradigma: sustituir el término “salud mental” por “salud cerebral”, con el fin de eliminar el estigma asociado y fomentar el autocuidado de este órgano esencial.
Una nueva narrativa sobre el bienestar mental

Amen abrió las puertas de su hogar a los realizadores para mostrar de primera mano sus métodos, centrados en redefinir la salud mental desde una perspectiva cerebral. En el documental, el psiquiatra explica: “En lugar de etiquetar a alguien como ‘mental’ y avergonzarlo, deberíamos referirnos a ellos como que tienen problemas de salud cerebral, elevándolos en lugar de denigrarlos”. Para él, la clave está en priorizar el cuidado del cerebro: una mente sana sigue naturalmente a un cerebro sano.
Compromiso personal y trayectoria profesional
Con más de 35 años de experiencia, Amen, psiquiatra con doble certificación de junta, trabajó con una amplia gama de personas, incluidas celebridades como Justin Bieber, quienes mostraron mejoras notables con sus métodos clínicos.

Los tres pilares de la salud cerebral
El experto detalló tres principios fundamentales para el cuidado del cerebro, basados en su extensa experiencia clínica:
- Cuidar activamente el cerebro: a diferencia de otros órganos, el cerebro no se ve y, por tanto, suele ser ignorado. El especialista sostiene que su mantenimiento debe ser tan prioritario como el del corazón o los pulmones, incluyendo chequeos regulares y hábitos saludables.
- Evitar daños cerebrales: hábitos como una dieta rica en azúcar, falta de sueño, exposición excesiva a pantallas y escasa actividad al aire libre son perjudiciales. Recomienda una dieta rica en nutrientes y un estilo de vida que minimice los factores de riesgo.
- Potenciar el cerebro con actividades cotidianas: el buen descanso permite al cerebro eliminar toxinas. Además, el ejercicio físico regular y prácticas como la atención plena pueden reducir la ansiedad y la depresión.
Tecnología al servicio del diagnóstico psiquiátrico
Las Amen Clinics transformaron el diagnóstico en psiquiatría mediante el uso de Brain SPECT imaging, una técnica que permite visualizar el flujo sanguíneo y la actividad cerebral con mayor precisión que los métodos tradicionales. Este enfoque proporciona una evaluación integral que contempla aspectos biológicos, psicológicos, sociales y espirituales.
La atención personalizada y el énfasis en soluciones menos tóxicas y más eficaces son características centrales de este modelo. Nuevamente, se destaca el caso de Justin Bieber, como ejemplo de los beneficios obtenidos con esta metodología.
Alzheimer: ¿una enfermedad reversible?

Uno de los interrogantes más relevantes en el campo de la salud cerebral es la posibilidad de revertir el Alzheimer. Aunque no existe una cura definitiva, Amen sostiene que una intervención temprana y un enfoque integral pueden ralentizar su progresión e incluso mejorar la función cognitiva en algunos casos.
“Te proporcionamos las herramientas que necesitas para tener un mejor cerebro y una mejor vida, ahora y en el futuro”, afirma el especialista. Esta visión proactiva contrasta con enfoques tradicionales enfocados en el manejo de síntomas.
El legado de un enfoque integral
A través de su participación en “Biohack Yourself”, Amen refuerza su llamado a transformar la forma en que concebimos la salud mental. Propone dejar atrás el estigma para avanzar hacia una cultura de empoderamiento y prevención, donde el cerebro ocupa el lugar central en el bienestar integral. Su propuesta actúa como un puente entre ciencia avanzada y aplicación práctica, con el objetivo de hacer accesible el cuidado cerebral para todas las personas.